El Antiguo Testamento comprende una colección de textos religiosos que tienen una inmensa importancia en las tradiciones judía y cristiana. Dividido en varias secciones, consta de varios libros que ofrecen literatura histórica, profética y sapiencial. Una de estas divisiones dentro del Antiguo Testamento es la inclusión de siete libros específicos, conocidos comúnmente como libros «deuterocanónicos» o «apócrifos». Estos libros, aunque no son considerados canónicos por todos los grupos religiosos, proporcionan una valiosa visión de los contextos religiosos y culturales de la antigüedad.
Entendiendo el Antiguo Testamento:
Antes de profundizar en el conjunto específico de siete libros, es importante tener una comprensión básica del Antiguo Testamento en su conjunto. El Antiguo Testamento es una recopilación de textos religiosos que forman las escrituras sagradas del judaísmo y el cristianismo. Abarca un vasto período de la historia, que comienza con la creación del mundo y termina con los acontecimientos ocurridos alrededor del siglo II a.C.
Dentro del Antiguo Testamento hay tres secciones principales: la Torá (Pentateuco), los Profetas y los Escritos. La Torá consta de los cinco primeros libros: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. Los Profetas comprenden Josué, Jueces, 1 Samuel, 2 Samuel, 1 Reyes, 2 Reyes, Isaías, Jeremías, Ezequiel y los Doce Profetas Menores. Los Escritos incluyen Salmos, Proverbios, Job, Cantar de los Cantares, Rut, Lamentaciones, Eclesiastés, Ester, Daniel, Esdras-Nehemías y Crónicas.
Sin embargo, además de estos libros comúnmente reconocidos, hay un conjunto de siete libros que no son universalmente aceptados en todas las tradiciones religiosas.
Los Siete Libros del Antiguo Testamento:
Los siete libros conocidos como libros Deuterocanónicos/Apócrifos son:
- Tobit
- Judit
- Sabiduría de Salomón
- Sirach (Eclesiástico)
- Baruc
- 1 Macabeos
- 2 Macabeos
Estos libros ofrecen una variedad de historias, enseñanzas y relatos históricos que contribuyen a la narrativa general del Antiguo Testamento. Exploran temas como la fe, la sabiduría, la moralidad y las luchas a las que se enfrentó el pueblo judío durante distintos periodos de su historia.
Significado y trascendencia:
La inclusión de estos siete libros en el Antiguo Testamento es objeto de debate y varía entre las distintas tradiciones religiosas. Mientras que el catolicismo romano, la ortodoxia oriental y algunas confesiones protestantes los reconocen como canónicos, otros grupos los consideran apócrifos o no canónicos.
Para quienes los aceptan como parte del canon, estos libros proporcionan una visión adicional del entorno religioso, social y cultural de la antigüedad. Arrojan luz sobre los acontecimientos históricos y las creencias espirituales que rodeaban a la comunidad judía, lo que da lugar a una comprensión más rica del Antiguo Testamento en su conjunto.
Conclusión:
Los siete libros del Antiguo Testamento, a saber, Tobit, Judit, Sabiduría de Salomón, Eclesiástico, Baruc, 1 Macabeos y 2 Macabeos, son una parte esencial de la colección Deuterocanónica/Apócrifa. Aunque no gozan de aceptación universal, ofrecen valiosas aportaciones al contexto religioso e histórico del Antiguo Testamento. Explorar estos libros puede profundizar nuestra comprensión de las diversas historias, enseñanzas y experiencias que encierra el Antiguo Testamento, enriqueciendo nuestro camino espiritual.