Desde hace siglos, las Islas Canarias profesan una arraigada devoción a su patrona, la Virgen María. Reconocida bajo diversos nombres y advocaciones, la Virgen de Candelaria se erige como la figura más venerada y querida del archipiélago. Este artículo pretende dar a conocer la identidad y el significado de la Virgen patrona de Canarias.
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La Virgen de Candelaria: un emblema de fe
La Virgen de Candelaria, también conocida como Nuestra Señora de Candelaria, ocupa un lugar estimado y sagrado entre el pueblo canario. Su nombre procede de la palabra española «candela», que significa vela, y simboliza la luz guía que representa para sus seguidores.
La leyenda cuenta que, en 1392, dos cabreros guanches (los habitantes originarios de las Islas Canarias) descubrieron una estatua de la Virgen María con un niño, escondida entre juncos en la playa de Candelaria. Venerada como un hallazgo milagroso, la imagen se convirtió en una poderosa fuente de fe y devoción para los lugareños. El descubrimiento de la estatua provocó la construcción de un santuario, que ha evolucionado hasta convertirse en la magnífica Basílica de Candelaria, situada en el municipio de Candelaria, en la isla de Tenerife.
La Celebración de la Virgen Patrona
Cada año, el 2 de febrero, el pueblo canario celebra la festividad de la Virgen de Candelaria, en honor a su patrona. Esta celebración, conocida como la Solemnidad de Nuestra Señora de Candelaria, atrae a miles de creyentes de todo el archipiélago y de fuera de él.
Las fiestas consisten en diversos actos religiosos y culturales que se celebran en Candelaria. Los peregrinos se reúnen para presentar sus respetos a la Virgen y participan en procesiones, actuaciones musicales y bailes tradicionales. Es un momento de gran alegría y devoción, ya que los fieles se reúnen para expresar su gratitud y buscar las bendiciones de la Virgen patrona.
Elevada a Patrona de Canarias
No fue hasta 1716 cuando el Papa Clemente XI declaró oficialmente a la Virgen de Candelaria patrona de Canarias. Este reconocimiento papal solidificó la arraigada devoción de los habitantes de la isla hacia la Virgen, reconociéndola como su protectora, intercesora y símbolo de unidad.
Desde entonces, la devoción a la Virgen de Candelaria no ha hecho más que crecer, con numerosas iglesias y capillas dedicadas a ella en todas las islas. La Basílica de Candelaria, situada junto al Océano Atlántico, sigue siendo el lugar de culto más importante, y atrae a innumerables peregrinos y turistas por igual.
Significado más allá de las Islas Canarias
Aunque la Virgen de Candelaria ocupa un lugar especial en el corazón de los canarios, su influencia se extiende mucho más allá del archipiélago. Su veneración se ha extendido a diversas partes del mundo, especialmente entre la diáspora canaria, que ha llevado su devoción allí donde se ha asentado.
Además, la imagen de la Virgen de Candelaria sirve como símbolo de la identidad y unidad canarias. Su imagen adorna a menudo emblemas oficiales, banderas, obras de arte e incluso tatuajes, representando una profunda conexión con la herencia y la fe compartida entre el pueblo canario.
En Conclusión
La Virgen de Candelaria es la amada patrona de las Islas Canarias, apreciada durante siglos por los habitantes de la isla. Honrada cada año el 2 de febrero, día de su festividad, la Virgen ocupa un lugar destacado en las tradiciones religiosas y culturales del archipiélago. Con su milagroso descubrimiento y posterior reconocimiento papal, la Virgen de Candelaria se ha convertido en un emblema perdurable de fe, esperanza y unidad para los canarios, trascendiendo fronteras y conectando a comunidades de todo el mundo.
La Virgen de Candelaria es la patrona de las Islas Canarias.